|
3 huevos
100 g de azúcar
80 g de harina
25 g de cacao en polvo
2 dl de nata líquida
100 g de chocolate negro
Precalentar el horno a 200 ºC.
Engrasar un molde rectangular y forrar con papel sulfurizado.
Poner un cazo al baño maría con los huevos y el azúcar, y batir hasta obtener una crema suave.
Retirar del fuego y seguir batiendo hasta que se enfríe.
Agregar la harina tamizada, el cacao tamizado y 1 cucharada de agua caliente.
Mezclar y verter en el molde.
Nivelar la superficie.
Hornear durante 12-15 minutos, hasta que se dore y adquiera consistencia de bizcocho.
Desmoldear sobre una hoja de papel de horno y enrollar el bizcocho.
Envolver en un trapo húmedo y dejar que se enfríe.
Montar la nata.
Picar la mitad del chocolate (50 gramos) y mezclar con la nata.
Disponer el resto del chocolate al baño maría para que se funda.
Con ayuda de una cucharita hacer formas geométricas sobre una hoja de papel sulfurizado.
Enfriar y dejar dentro de la nevera al menos 1 hora.
Desenrollar el bizcocho y untar con algo menos de la mitad de la nata montada.
Volver a enrollar y esparcir el resto de nata por encima.
Decorar con las figuras geométricas de chocolate y servir enseguida o reservar en la nevera hasta el momento justo de
llevar a la mesa.
|
