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1 pan lácteo
1 litro de leche
2 cucharaditas de esencia de vainilla
1/4 k de azúcar
2 huevos
3 yemas
2 claras
Varios:
Budinera acaramelada de 1 litro y medio de capacidad y sabayón para acompañar
Quítele la corteza a las tajadas de pan. Mida 300 g de miga y córtela en cubitos.
Coloque los cubitos de pan en un bol suficientemente grande.
Vierta la leche en una cacerola y hágala hervir. Vuelque la leche caliente sobre los cubitos de pan.
Agregúeles el azúcar y la esencia de vainilla. Espere a que la miga se esponje y el azúcar se disuelva.
Mezcle todo con un tenedor, desmigajando bien el pan.
Tamice la mezcla en otro bol para obtener una mezcla homogénea. Reserve.
Bata los huevos con las yemas. Una este batido al pan que desmigajó con la leche.
Bata las claras a punto de nieve bien firme. Una las claras a la mezcla anterior, uniendo todo con movimientos envolventes.
Vierta la mezcla en la budinera acaramelada. Coloque el molde a bañomaría y cocine el budín en el horno, hasta que esté
firme. Compruebe la cocción clavándole un palillo: debe salir sin adherencias.
Retire el molde del horno y del bañomaría, y déjelo enfriar. Recién ahí, desmóldelo directamente sobre la fuente donde
lo va a servir. Este postre puede ir con sabayón.
Manténgalo en la heladera hasta el momento de llevarlo a la mesa. Ofrezca aparte sabayón. Mi receta de sabayón es así:
Poner en un bol 5 yemas y 5 cucharadas de azúcar y batirlas hasta que estén espumosas. Agregarles 1 cucharada de agua
y 5 cucharadas de Oporto. Batir a bañomaría, sin que la base del bol toque el agua, hasta que esté espeso y cremoso, pero
sin que llegue a hervir. Si se lo va a utilizar frío batirlo hasta que se enfríe así no decanta el Oporto.
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