Derretir en una cacerola a fuego lento los 400 g de chocolate y los 50 g de mantequilla. Romper los 8 huevos separando
las claras de las yemas. Agregar 4 yemas al chocolate derretido. Con una batidora, batir las 8 claras a punto de nieve agregando
una pizca de sal para darles más firmeza, y mezclarlas delicadamente con el chocolate. Pasar la mezcla a un recipiente y conservar
un mínimo de 4 horas en el refrigerador.
Rebanar la piña en rodajas finas y quitarles la cáscara; dorarlas durante 20 minutos añadiéndoles un poco de azúcar.
Para servir:
Recalentar las piñas al horno unos 5 minutos hasta que estén tibias. Con la ayuda de una cuchara de metal, sacar porciones
ovaladas y colocarlas elegantemente sobre el plato. Servir una rebanada de piña por plato y al último momento colocar una
bola de helado de frutas rojas. No espere más: ¡está listo!
Vino para acompañar
Hay muchos vinos que le van bien al chocolate. El St. Emilion es un buen ejemplo si es que usted prefiere el vino tinto.
Si le gusta más el vino blanco dulce, un Saint Croix du Mont (Bordeaux) le va de maravilla. Pero el gran placer reisde indiscutiblemente
en acompañarlo con una champaña rosa como la comte de Laurent-Perrier 1985. |